La Policía Local de Badajoz, con apoyo de la Policía Nacional y la Guardia Civil en el perímetro de la ciudad para interferir la entrada de camiones, van a intentar "cortar de raíz" la venta ambulante de comida en la calle durante la celebración del Carnaval, según explicó ayer el primer teniente de alcalde, Germán López Iglesias, tras la reunión de la Junta de Seguridad Local, convocada para concretar las medidas a adoptar los próximos cuatro días de fiesta.

En función de la afluencia de público, se han previsto cortes de tráfico puntuales en la plaza de España y calles adyacentes; en la plaza de San Atón, Minayo, Pedro de Valdivia y Juan Carlos I y en la avenida de Villanueva hasta Rafael Lucenqui y Saavedra Palmeiro hasta San Isidro, además de las plazas de Santa María de la Cabeza y de los Alféreces. Se han calculado 289 servicios de policía local (25 más que el año pasado), 255 de Policía Nacional y 107 de la Guardia Civil, 53 efectivos de la Cruz Roja, 27 servicios de los bomberos y 60 de Protección Civil. Habrá puntos fijos policiales en la plaza de España, Juan Carlos I, Dragones Hernán Cortés, avenida de Villanueva con Santa Marina y Saavedra Palmeiro con San Isidro. Los refuerzos policiales se anuncian especialmente para las noches del sábado y del lunes. Los bares podrán abrir hasta las 8.00 de la mañana y cerrar necesariamente hasta las 12.00 del mediodía para facilitar las labores de limpieza.

En cuanto a los desfiles, en el recorrido del infantil que se celebra mañana por la tarde desde la avenida de Europa a la plaza de España, no se podrá aparcar desde las 7.00 de la mañana. Para el desfile del domingo, que se inicia a las 12.00, no se podrá estacionar desde las 12.00 del sábado. El superintendente, Rubén Muñoz, pidió la colaboración ciudadana.