Otra de las obras pendientes que incrementará la oferta cultural en el casco antiguo es la rehabilitación del viejo mercado de Santa Ana, cuyas obra se ha iniciado con cargo al Plan E.
Este viejo y abandonado inmueble que fue mercado se transformará en biblioteca, pero además será la cabecera dela red de bibliotecas municipales, según la concejala de Cultura, Consuelo Rodríguez Píriz, quien recordó que una vez se traslade la Biblioteca Bartolomé J. Gallardo a su nueva sede, junto al puente Real, la de Santa Ana será la única que quede en el centro de la ciudad.
Por ello desea que se convierta en un referente para la población de la zona y para el resto de las bibliotecas municipales. La delegada de Cultura comparte con el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, la idea de que la totalidad del edificio se destine a biblioteca.
La red municipal la integran seis bibliotecas repartidas en las barriadas de San Fernando, Pardaleras, Cerro de Reyes,
Antonio Domínguez, San Roque y Llera, y cinco agencias de lectura en los poblados de Balboa, Valdebótoa, Alvarado, Sagrajas y Novelda, a las que se sumará a partir de julio la nueva iniciativa del bibliobús.
El pasado año estas bibliotecas, que tienen 38.625 volúmenes, recibieron 45.084 visitas. La biblioteca más frecuentada fue la de Valdebótoa, con 7.110 visitas, seguida de la de Antonio Domínguez con 6.530, sin embargo la que menos visitantes recibió fue la de San Roque, que pese a ser uno de los barrios más poblados tuvo solo 1.738, aunque la de San Roque es, después de la de Pardaleras, la que más fondos tiene, 5.287 libros. Píriz reconoció que después de la inversión realizada este año en la de Cerro de Reyes, la siguiente a la que se dará "un empujón" será la de San Roque.
