Como autores responsables, cada uno de ellos, de un delito contra la salud pública, de sustancias que causan grave daño, la Audiencia Provincial ha condenado a un total de 14 años y medio de prisión a tres narcos de la barriada placentina de San Lázaro.
Se trata del matrimonio formado por María Montaño y Angel Vargas, a cada uno de los cuales se condena a 5 años de prisión y multa de 30.000 euros (el ministerio fiscal pedía 6 años de prisión y la misma multa); y de Azucena Pardo, a la que se ha impuesto una condena de 4 años y 6 meses de cárcel y multa de 30 euros (el fiscal solicitaba para ella 5 años).
Los hechos por los que fueron juzgados el pasado día 16 y ahora han sido condenados se remontan a agosto del 2007, cuando en el transcurso de una operación policial contra el tráfico de drogas en su barriada se llevó a cabo la entrada y registro de sus respectivos domicilios, interviniendo la policía en el domicilio del matrimonio casi 60 gramos de droga, dinero y diversos útiles para la preparación de papelinas; y en el de la tercera acusada un cofre con una cucharilla con restos de droga, dinero y joyas.
Todos negaron dedicarse a la venta de drogas, alegando que lo incautado era para autoconsumo de sus maridos, pero un testigo protegido que declaró en el juicio señaló a las dos mujeres como las que en varias ocasiones le habían vendido droga en sus casas.
