Un total de 381 muertes violentas se registraron en la región el pasado año. De éstas, 152 se contabilizaron en la provincia de Cáceres y 229 en la de Badajoz, según las estadísticas de los institutos de medicina legal de ambas capitales recogidas en la memoria del TSJEx del 2004 que fue presentada ayer.

Los datos facilitados reflejan que la mayoría de estas muertes violentas fueron accidentales --107 en Cáceres y 165 en Badajoz--, aunque también son aún elevados los suicidios --62 hubo el año pasado en Badajoz y 43 en Cáceres-- y se registran algunos homicidios --4 se contabilizaron el pasado año, dos en cada provincia--.

Entre las muertes violentas accidentales el mayor número lo producen los accidentes de tráfico --el año pasado se produjeron en la región 192 muertes en accidentes de tráfico--, aunque también se siguen dando muertes violentas accidentales por precipitaciones, electrocución, hipotermia, intoxicaciones y reacciones adversas a drogas.

Y en cuanto a las muertes suicidas, el procedimiento más empleado tanto en Cáceres como en Badajoz es la ahorcadura --39 en Badajoz y 17 en Cáceres--, seguido de la precipitación --11 y 6-- y la sumersión --5 y 7 respectivamente--.