La reunión que el martes celebraron en Cáceres el consejero de Fomento, José Luis Quintana, y la alcaldesa, Carmen Heras, abre una serie de interrogantes sobre el futuro de la expansión urbanística de la ciudad. Quintana mostró sus dudas porque en la revisión del Plan General Municipal (PGM) se planifique una ciudad para "325.000 habitantes". No comentó más, pero sus afirmaciones de que esta es una de las cuestiones a analizar de las recogidas en el nuevo plan de urbanismo pone en entredicho la expansión y parte de los nuevos suelos urbanizables que se planifican en el plan, en especial aquellos que se tipifican de prioridad 2 y 3, con una previsión de que en ellos se puedan ejecutar 23.212 viviendas.
La justificación de estas viviendas a muy largo plazo solo obedece a una previsión de crecimiento de población, y si esta es una planificación que se está cuestionando también se está dudando de unos nuevos sectores que aparecen en el plan como una reserva de terreno en previsión de una expansión urbana a muy largo plazo
El plan general fija una prioridad 1 ya ordenada y con un potencial de 22.877 viviendas, y otra prioridad 1 sin ordenación con más de 8.000 pisos, además están las actuaciones en suelo urbano y en sus bordes con más de 3.500 viviendas, y luego aparecen las 1.733 unifamiliares para segunda residencia de la estación de Arroyo, otra proyección que Quintana cuestionó con sus declaraciones del pasado martes.
Otra de las cuestiones que quedan por resolver es el grado de modificaciones que se introducirán en el nuevo plan general y si se considera que causarán cambios sustanciales en su contenido que obligarán a una nueva exposición del documento, algo que ya pasó con el plan general en vigor durante el primer mandato de José María Saponi (1995-1999), cuando la Junta hizo observaciones que obligaron a exponer de nuevo el plan.
Hay un segundo interrogante destacado que las declaraciones del martes de Quintana y Heras no resolvió. El consejero aseguró que la intervención en las inmediaciones de la cantera de Olleta no se tramitará con un proyecto de interés regional (Pir) que agiliza las recalificaciones, sino dentro del plan general. Ligado al Pir de la cantera de Olleta, que tenía al presidente de la Agencia de la Vivienda, José Javier Corominas, a su principal valedor, se presentó un gran auditorio al aire libre, proyectado por el arquitecto portugués Alvaro Siza. No se ha aclarado si el proyecto de auditorio se mantiene o si es una idea a descartar cuando la ordenación del espacio de la cantera se realice en consonancia con el resto de las previsiones en el nuevo plan de urbanismo. Tampoco se aclaró el martes qué ocurrirá con las viviendas, 3.650 en el último proyecto, que se harían en sus inmediaciones.
La intervención en Olleta tal como se proyectó fue cuestionada por sectores tan diversos como la construcción o el grupo de IU, ahora en el gobierno con el PSOE. La empresa dueña de la cantera pidió en un principio que esta zona se contemplase dentro del PGM por colisionar con los sectores de viviendas que se planifican enfrente de esta explotación.
Felipe Vela y Castellano
El concejal de Foro Ciudadano, Felipe Vela, recordó ayer que él ya se había referido a que el plan estaba sobredimensionado y añadió que los cambios que se hagan ahora deben ser en aquellas cuestiones que no se ajusten a la legalidad, apuntando que tampoco se puede retrasar en exceso la aprobación del plan. Por su parte, el portavoz del Partido Popular, Francisco Javier Castellano, opinó que las declaraciones de Quintana y Heras generan incertidumbre en las previsiones sobre el desarrollo de la ciudad.
