La presidenta de la comisión local de Participación Ciudadana, Carmen Lillo, entregó ayer a los grupos políticos el borrador del nuevo reglamento que regulará la participación ciudadana en el municipio. El borrador completa la intervención de los colectivos y de los ciudadanos ante el pleno de la corporación local e incluso ante otros órganos como las comisiones informativas y los consejos rectores de los organismos autónomos. En la regulación de la iniciativa ciudadana se incluye que un 5% de los habitantes empadronados en la ciudad pueden efectuar propuestas de asuntos para su inclusión en el orden del día del pleno. Ese 5% supone 4.653 cacereños, según datos del padrón a fecha de 1 de enero.

Este documento va más allá que el reglamento orgánico municipal, que es el que ha posibilitado que dos colectivos hayan intervenido en el último pleno celebrado por la corporación local. Por ahora solo se puede participar planteando un asunto o haciendo una petición al término de la sesión. Con el reglamento de participación se podrá intervenir en los temas incluidos en el orden del día de la sesión. Esa participación será anterior al debate y a la votación por parte de los ediles de la corporación.

La intervención sería doble. Por un lado los ciudadanos pueden plantear que un tema se incluya para su debate, y por otro pueden pedir la participación en los asuntos ya incluidos en el orden del día si cumplen los requisitos que da el reglamento.

El borrador incorpora otras cuestiones que son novedosas, como la retransmisión de las sesiones del pleno a través de la página web municipal o la creación de una radio y televisión locales, y formaliza la constitución de nuevos órganos, como los consejos de distritos, que serían cinco, ya que en el borrador se divide la ciudad en cinco zonas. Además pone las bases para la regulación de los presupuestos participativos y para la agenda municipal, una figura que favorecería la intervención ciudadana en, como mínimo, el plan general municipal, los proyectos urbanísticos que sean de trascendencia (en este caso, por ejemplo, estaría una actuación como la de El Corte Inglés en Las Carmelitas), en las ordenanzas relevantes y en los presupuestos a través de la metodología del presupuesto participativo.

El borrador está sujeto a las aportaciones que hagan los grupos políticos y también a las alegaciones en su exposición pública. Ya ha tenido una primera fase de consulta, en la que ha habido 176 alegaciones de colectivos que se han tenido en cuenta para el texto presentado ayer.