La Audiencia Provincial ha condenado a cuatro años y medio de prisión a un cacereño que vendía cocaína en el entorno de su domicilio, en la calle José Luis Cotallo, y que fue detenido en mayo del año pasado tras ser sometido a vigilancia e intervención telefónica por la Policía Nacional. El tribunal le impone tres años y medio de prisión por el tráfico de droga y un año por tenencia ilícita de armas, ya que en el registro de su vivienda se hallaron dos pistolas para las que carecía de licencia, siendo además una de ella de uso prohibido. Se le ha considerado como atenuante su condición de drogadicto.

Además, se la ha impuesto una multa de 1.411 euros por el tráfico de droga y otra de 360 euros por una falta de resistencia leve a la autoridad porque, una vez detenido, trató de eliminar dos papelinas metiéndoselas en la boca y forcejeó con los agentes.