Desde la resolución de la alcaldía, que es del pasado 27 de octubre y que firma por delegación la concejala de Economía. No se aplica de oficio, el contribuyente tiene que pedirla. La suspensión se mantendrá hasta que este cerrada la reforma del impuesto, momento en el que se determinará si la suspensión deriva en la anulación del tributo o si se tiene que pagar.