Sólo un 30% de los comerciantes de la asociación Pintores-Monumental apoya la peatonalización de la calle Roso de Luna, tras una encuesta realizada por este colectivo entre sus asociados. El proyecto municipal de cerrar al tráfico el centro, incluidos un tramo pendiente en Donoso Cortés y el acceso a la iglesia de San Juan, choca con los intereses de los empresarios.

En su último boletín informativo, la asociación de comerciantes Pintores-Monumental anuncia que no respaldará las medidas para peatonalizar Roso de Luna y reclama que, en su lugar, se dote a la zona de mayores servicios. A pesar de que el consistorio aún no ha fijado la fecha para poner en marcha el cierre al tráfico de los vehículos, el colectivo empresarial afirma que las medidas municipales deben ir dirigidas a la "revitalización" de la zona.

Aunque hace más de un año el ayuntamiento anunció que con la apertura del aparcamiento de Obispo Galarza se podría acometer la peatonalización, hasta la fecha sólo se ha realizado la modificación del sentido de la circulación en la calle Clavellinas, con la instalación de un nuevo semáforo, en dirección única hacia la calle Parras.

ALTERNATIVAS AL CIERRE

El debate suscitado por el proyecto municipal ha provocado reacciones de distinta índole entre los empresarios afectados. Vicente González, propietario del Hostal La Boheme, en la calle Pizarro, opina que la peatonalización será "positiva, siempre y cuando los conductores tengan alternativas de estacionamiento en el casco histórico". Explica que hay que facilitar el aparcamiento a los turistas y lamenta que a los pequeños negocios hoteleros no se les den más facilidades: "En mi caso, he solicitado un vado para que mis clientes puedan dejar las maletas y que luego les busquemos un sitio, pero todavía no he tenido respuesta", subraya.

Por su parte, Margarita Rubio, gerente del nuevo hotel Don Carlos, en la calle Donoso Cortés, cree que la peatonalización no afectará en exceso a su establecimiento: "El aparcamiento no es un problema porque tenemos cerca la plaza Marrón. Los viajeros paran en la calle y descargan el equipaje". A pesar de ello, defiende la creación de más plazas de aparcamiento y de una mejor señalización.