El Romanticismo, el Naturalismo, el Realismo, el Impresionismo, el Iluminismo y el Modernismo son muy diferentes tendencias artísticas relacionadas con la pintura que, sin embargo, comparten algo en común: que surgieron durante el comienzo del siglo XX, siendo capaces de romper con los cánones académicos impuestos hasta entonces.

Por ello, la Fundación Mercedes Calles y Carlos Ballesteros (FMCCB) ha querido aunar en una exposición --de las más importantes del panorama español según la FMCCB--, denominada ‘De Fortuny a Sorolla. Colección Gerstenmaier’, dichos movimientos artísticos transgresores para la época reuniendo, en su sede la Casa-Palacio de los Becerra, 76 cuadros de la colección del empresario alemán afincado en España, Hans Rudolf Gerstenmaier. En la colección expuesta de Gerstenmaier, que ha logrado reunir en 30 años más de 150 pinturas europeas de diversas escuelas y procedencias, se pueden contemplar obras de pintores de la talla de Carlos de Haes, Raimundo Madrazo, Joaquín Mir, Antonio Muñoz Degrain, Isidro Nonell, Francisco Pradrilla Ortiz, Darío de Regoyos, Santiago Rusiñol, Ignacio Zuloaga y, por supuesto, los pintores que dan nombre a la exposición: Mariano Fortuny y el gran maestro Joaquín Sorolla, entre otros. Los cambios sociales y la transformación de las corrientes del pensamiento a finales del siglo XIX y principios del XX llevaron el triunfo de los valores individuales. Esa nueva dimensión de la persona convirtió al retrato en uno de los géneros más importantes. Así, de Sorolla destacan obras como el ‘Retrato de Isabel Herraud’ y el ‘Retrato de la dama desconocida’, mientras que de Fortuny resaltan ‘Poblado cabileño. Puesto de vigía: Avant-poste árabe. Marruecos’ y ‘El camellero’, que se expondrán a finales de año en el Museo del Prado.

La muestra, que fue inaugurada ayer por el director de la FMCCB, Luis Acha, y el propietario de la colección, permanecerá expuesta hasta el 15 de octubre. Se puede visitar de lunes a sábados de 11.00 a 14.00 y de 17.30 a 20.30 horas, y domingos y festivos de 11.00 a 14.00 horas. En cambio, cerrará los lunes de julio y agosto.

«Soy un buscador de la belleza», señaló Gerstenmaier, que desembarcó en España en 1963, se enamoró de su «riqueza pictórica» y decidió coleccionarla. La exposición «debe verse una, dos o tres veces», apuntó el coleccionista, que destacó también los paisajes sobre Venecia de Martín Rico, considerado el iniciador del paisajismo moderno español, catalogándolos como «una verdadera joya».