El pub Maquiavelo, situado en la plaza de Albatros, fue el viernes el escenario de la segunda fiesta light incluida dentro del programa municipal Abrimos la noche , una iniciativa que pretende fomentar entre los jóvenes de la ciudad el ocio saludable y sin alcohol. La entrada a esta fiesta, la segunda de las tres que se han programado a lo largo de este mes, era gratuita. Hubo música, bebida sin alcohol y comenzó a las siete de la tarde.

El concejal responsable de esta actividad, Javier Castellano, se congratuló ayer del éxito de Abrimos la noche , programa que ahora se encuentra desarrollando su segunda fase y por el que, hasta el momento, han pasado 5.500 personas. La primera fase unió a 6.000 jóvenes cacereños, lo que supondrá este año un total de 11.500 participantes.

BAILE Y CINE Además de la fiesta light , la iniciativa municipal incluye también una academia de baile, que se celebra los viernes y sábados y que el pasado fin de semana contó con una asistencia de 120 personas. El total de asistentes a este taller en esta segunda fase ha sido de 480 participantes, lo que supera la cifra de 385 de la edición anterior.

Por su parte, el deporte nocturno y el cine de madrugada, otra de las dos actividades estrella, continúan con su éxito habitual. Los pabellones del Vivero, San Jorge y Juan Serrano Macayo son los tres que acogen los campeonatos deportivos. En total han participado en las competiciones 4.300 jóvenes, de ellos 1.800 lo han hecho en la segunda fase y el resto, en la primera. De todos los pabellones, el más demandado es el municipal, que ha acogido en esta segunda edición a 1.100 chavales.

El cine de madrugada ha contado con la presencia de 4.500 espectadores a lo largo de todo el año, manteniendo el éxito de ediciones anteriores. El taller de malabares, que estrena horario y ubicación en esta segunda fase (en la anterior era los sábados a las diez de la noche en la Casa de Cultura de Moctezuma y en esta se ha trasladado a los viernes, a partir de las once, en el Juan Serrano Macayo) ha aumentado el número de participantes, superando los 20 cada fin de semana. La asistencia registrada a lo largo de todo el año alcanza los 500 jóvenes, según datos del Instituto Municipal de Juventud, facilitados a este diario.

Castellano indicó que la primera fiesta que se celebró en Maquiavelo reunió a 250 chavales, "a los que se les proporcionaron regalos y se les dio la posibilidad --explicó-- de disfrutar de buena música en un ambiente sano".