Un interno del Centro Penitenciario de Cáceres acusado de un delito de tráfico de drogas en establecimiento penitenciario, por el que el fiscal pedía cuatro años de prisión, ha resultado absuelto.

Tras el juicio, en base a las pruebas y declaraciones de los testigos, el titular del Juzgado de lo Penal considera, y así lo recoge en su sentencia, que no se ha probado que los casi 30 gramos de hachís que los funcionarios encontraron ocultos en su celda estuvieran destinados a la venta a otros internos, y no para su consumo. Es por ello que le absuelve, coincidiendo así con los argumentos del abogado defensor, Jaime Rojas Prieto.

Los hechos por los que el preso ahora absuelto ha sido juzgado tuvieron lugar el 11 de enero del 2004, cuando su familia le visitó y al regresar los funcionarios le registraron ante la sospechas de que le hubieran pasado droga.