La reconstrucción del edificio de Virgen de la Montaña vive su último capítulo. La restauración del bloque del número 19 de la avenida en el se produjo una explosión en dos viviendas contiguas (4º H y 4º I) propiedad de la misma persona el pasado noviembre, provocando la muerte del inquilino, ha terminado por completo según informó ayer el director de la obra, José Luis Pedrera, el arquitecto contratado por la comunidad de vecinos para elaborar el proyecto de reconstrucción. Según Pedrera, ya solo restan pequeños remates como labores de limpieza en las escaleras o la colocación de dos vidrieras en las puertas de madera de los accesos a los pasillos comunes de la cuarta planta.

En ese sentido, la dirección de la obra entregará hoy la documentación --con los certificados finales emitidos-- al ayuntamiento para que éste autorice el regreso de los todavía desalojados a sus viviendas, así como para la vuelta a su uso de aquellas que no estaban habitadas pero sí en proceso de venta o alquiler --de cara a que puedan visitarlas futuros compradores o inquilinos--. Para ello, el consistorio deberá emitir una resolución de alcaldía, tal y como sucedió para el regreso, el pasado 24 de febrero, de los dos primeros evacuados.

Actualmente todavía hay dos residentes que siguen fuera de sus domicilios, concretamente los inquilinos de las viviendas H e I de la tercera planta. No obstante, la previsión es que regresen de manera inminente.

Los trabajos de reconstrucción del inmueble de Virgen de la Montaña comenzaron en enero. Previamente, se tuvieron que llevar a cabo labores de demolición y desescombrado debido al estado en el que quedó gran parte del edificio, sobre todo en el entorno de las viviendas de la cuarta planta donde se originó la explosión.

DAÑOS ESTRUCTURALES / El inmueble solamente sufrió daños estructurales en el techo de la cuarta planta. En la quinta planta, las viviendas afectadas fueron las letras I, H y C; en la tercera las letras H e I --sus inquilinos aún están fuera--; y en la cuarta planta la letra C, además de las dos casas en las que se originó la explosión, evidentemente. Los trabajos de reconstrucción llevados a cabo han tenido que ver con renovación de suelos y techos, pintura, sustitución de parqué y restitución de vestíbulos.

Pero, además de la reparación de las zonas comunes afectadas y aquellas partes de viviendas dañadas en las plantas tercera, cuarta y quinta, la dirección de obra ha acometido también la reconstrucción de la fachada exterior, así como la recomposición del muro que separaba las dos viviendas contiguas donde se originó la deflagración. La reconstrucción de cada una de las casas siniestradas deberá realizarla la aseguradora particular de las viviendas.