Reconoce que clavó una navaja en el abdomen a un joven de Coria, pero asegura que lo hizo sólo para defenderse. Es la declaración que Remi S. D. S., un joven acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa, prestó ayer en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial.

Los hechos por los que se encuentra en prisión desde marzo del 2003 y por los que ayer fue juzgado ocurrieron en la madrugada del 9 de marzo en las proximidades de la discoteca Tacal de Coria. El acusado se acercó a dos de los hermanos que regentan esta discoteca, que discutían con unas personas a las que antes habían echado del local, y clavó una navaja en el abdomen a uno de ellos, causando heridas en una mano al otro cuando éste intentó quitarle el arma.

El acusado manifestó una y otra vez que utilizó la navaja para defenderse de la agresión que sufrió por parte de los hermanos, pero éstos aseguraron que no hubo tal agresión y que utilizó el arma "de forma sorpresiva, sin motivo alguno".

Además de por este hecho, por el que se le acusa de un delito de homicidio en grado de tentativa, Remi S. D. S. fue juzgado también por una falta contra el orden público y otra de daños.

Según declararon los agentes de la Guardia Civil que le detuvieron, el acusado mantuvo en todo momento una actitud amenazante contra ellos y causó daños en el mobiliario y las dependencias del cuartel de Coria. El procesado se defendió indicando que "estaba muy nervioso y me quería ir a casa".

El fiscal consideró probados los hechos y solicitó para el acusado una pena de 8 años de prisión y 666 euros de multas, mientras que la defensa pidió la aplicación de la eximente completa de trastorno mental transitorio y las incompletas de drogadicción y embriaguez.