El desembalse del Guadiloba en la mañana del 5 de noviembre del 2006 causó daños en tierras de cultivo y en huertas que estaban aguas abajo del embalse. El desembalse se produjo tras una noche en la que se llegaron a registrar puntas de entrada al pantano de 400.000 litros por segundo y fue la primera ocasión en la que fue necesario abrir todas las compuertas laterales y centrales del Guadiloba. Afectados valoraron los daños ocasionados en sus fincas en 584.000 euros y una delegación se reunió ayer con la alcaldesa, Carmen Heras. Sobre la mesa está la pretensión de familias afectadas de obtener una indemnización que sea igual al valor de los daños causados por el agua en sus propiedades. La alcaldesa les indicó que se estudiará "el caso antes de tener una nueva reunión en la que se intentaría encontrar una solución", informó el ayuntamiento.

A la entrevista con Carmen Heras asistieron en representación de los afectados Javier Corbacho y Benito Quintanilla --en la fotografía, en primer plano, la mañana del 5 de noviembre--. Corbacho explicó que el objeto de la entrevista era informar al nuevo equipo del gobierno municipal de los daños que ocasionó el agua por el desembalse y de los resultados del informe pericial que se encargó, de cuyo contenido ya informó este diario y que, según recordó ayer Corbacho, eleva a 584.000 euros los desperfectos en tierras de cultivo, enseres, maquinaria y animales. Afirmó que los afectados tienen derecho a conseguir una indemnización "con independencia de quien tenga la culpa" de lo ocurrido dado que los daños "tienen su origen en un fenómeno meteorológico", agregó.

Corbacho apuntó que representan a los afectados que iniciaron un proceso judicial (primero vía penal y ahora en la vía civil y a la espera de la solución del ayuntamiento), que son unas diez familias y que en los meses transcurridos desde el suceso no han recibido indemnización. Según indicó Corbacho, una de las opciones que se vieron ayer en la reunión con Heras fue que se pueda dar un anticipo "vía Junta de Extremadura" dado que, según precisó, la alcaldesa les comentó que la situación económica municipal impide ahora hacer frente a este tipo de pagos.