Los trabajadores de Waechtersbach afiliados a la UGT han mostrado su pesar por las pérdidas de sus puestos de trabajo, pese a lo cual han manifestado que aceptan sus despidos. Así lo indicó ayer en rueda de prensa el secretario general de la Federación del Metal, Carbón y Afines (MCA) de UGT, Miguel Angel Rubio, quien anunció que ni su sindicato, que representa al 97% de los trabajadores de la fábrica de cerámica Waechtersbach en el comité de empresa, ni CSI-CSIF recurrirán el auto judicial dictado el pasado lunes y por el que se extinguen los contratos de 79 de los 85 trabajadores de la empresa (a seis se les han mantenido para la tienda y las oficinas).

"Las opciones que se podrían plantear para recurrir el auto e intentar retomar la actividad de la fábrica podría ser, incluso, más perjudicial para los trabajadores que la situación actual y, además, el recurso podría paralizar el proceso para que los trabajadores puedan solicitar su prestación de desempleo y las indemnizaciones por despido y los salarios que se les adeudan al Fondo de Garantía Salarial", advirtió el dirigente sindical.

En cuanto a las acciones iniciadas, Rubio anunció que han pedido a la Consejería de Economía y Hacienda una reunión para agilizar el compromiso adquirido por la Junta en el sentido de reorientar y formar a los trabajadores que han perdido sus puestos, "para lo cual los técnicos del Sexpe deberían hacer entrevistas personales a cada uno de los trabajadores y ver qué salida laboral les pueden dar". Y asimismo, añadió, solicitar que si en las actuales instalaciones de Waechtersbach se monta otra empresa, y si ésta recibe subvenciones o ayudas públicas, que tengan preferencia los trabajadores ahora despedidos.

En otro orden de cosas, Miguel Angel Rubio informó que su sindicato ha solicitado al Juzgado personarse, a través de sus asesores jurídicos, en el expediente que se mantiene abierto "con el fin de vigilar la liquidación de activos de la empresa y evitar posibles especulaciones".

PLAN DE VIABILIDAD Para el representante de UGT, como para todos los delegados de UGT en el comité de empresa de Waechtersbach, señaló su presidente, Francisco Morcillo, el plan de viabilidad que pretenden desarrollar unos 44 trabajadores de la fábrica para hacerse cargo de la empresa "es prácticamente imposible", pese a lo cual aseguraron que ellos no van a ir en contra, "les apoyaremos en todo lo que necesiten".

No obstante, tanto Rubio como Morcillo insistieron a este diario en su consideración de que el proyecto de estos trabajadores "es muy difícil de llevar a cabo, prácticamente inviable". De hecho, concluyó Rubio, "todos los técnicos que han estudiado la viabilidad de la planta, como paso previo a la decisión judicial, estimaron que no es viable puesto que tiene una forma de producción casi artesanal que requiere emplear mucha mano de obra y esto hace que los productos no sean competitivos".