La policía local tuvo que acudir a la 01.30 horas de la madrugada del domingo al lunes a la calle Gil Cordero donde, al parecer, frente a la gasolinera de Mirat se observó que había una persona manipulando un cajero automático. Desplazados hasta el lugar de los hechos, los agentes no observaron nada, si bien un individuo que estaba ebrio coincidía con las características facilitadas.

Desde hace unas semanas existe gran sensibilidad en la ciudad por este tipo de sucesos después de producirse una estafa de 90.000 euros que ha afectado a 75 personas. El robo se hizo tras la clonación de tarjetas de crédito.

Por otro lado, la policía local informa de que el pasado 19 de febrero se montó un servicio de control de venta ambulante en la ciudad. Se levantaron varios puestos y se intervinieron más de 28 kilos de fruta.