Cuarenta chicos de entre 8 y 16 años disfrutan cada diez días del campamento Urbano de Aldea Moret 'Te apuntas, te vienes', del Instituto Municipal de Asuntos Sociales, que clausura hoy su cuarto y último turno del verano, que comenzó el 18 de agosto (a la clausura asistirá el alcalde en funciones, Valentín Pacheco). Se trata de una iniciativa enmarcada en el programa de prevención comunitaria de drogas, subvencionado por el Ministerio de Sanidad y Política Social. El objetivo es aprender a convivir en un clima de compañerismo e integración y ofrecer alternativas de ocio saludable a un colectivo con especiales factores de riesgo, además de apoyar los procesos de desarrollo individual, sentimiento grupal y de participación. Todo ello tiene como escenario la piscina municipal de Aldea Moret, abandonada por situarse en una de las zonas más conflictivas de la ciudad de Cáceres, y que junto con el polideportivo de la barriada conforman las sedes de estos campamentos.

Cuatro monitores de la empresa Aossa, especializada en servicios deportivos, animación y tiempo libre, se encargan de coordinar a estos grupos de chicos, que asisten desde las 9 de la mañana hasta las 8 de la tarde. Los grupos cambian cada quince días, en un total de cuatro campamentos. "Todos ellos son del entorno de Aldea Moret", explica Pedro Pablo Garví, su director.

Entre las actividades que desarrollan hay deportes como "piragua, tiro con arco, rutas de orientación, además de actividades multiaventura como la escalada", cuenta Garví. Uno de los puntos fuertes son los ejercicios acuáticos, aprovechando el espacio de la piscina, que complementan con hinchables en los que los chicos se divierten. Pero no todo es deporte, también realizan actividades más enfocadas a lo cultural, como talleres y cine. "Por ejemplo, hemos hecho una noche del terror con películas", indica el director. Además, se realizan otro tipo de tareas: Salidas al campo, talleres medioambientales y actividades de educación en valores, así como visitas a la ciudad.

Otro de los objetivos es dar cobertura a las necesidades sociales de las familias de la barriada con dificultades económicas. Aquí entra el servicio de catering que incluye el campamento, al que asisten todos los participantes. "Otros años algunos niños elegían comer en sus casas, pero este todos se quedan a comer aquí", manifiesta Garví. La selección de los participantes se lleva a cabo mediante una valoración técnica de las circunstancias sociales de cada familia, como la renta familiar o la conciliación de los horarios laborales de los padres. En total, 160 niños han sido seleccionados para los cuatro campamentos de este verano.

Así, estos campamentos son un apoyo para las familias más desfavorecidas, a la vez que los niños disfrutan del verano y aprenden.