Dos niños imaginan un barco que surca el mar mientras leen un libro en braille y con la escritura convencional. La imagen pertenece al cartel con el que el colegio Proa ha ganado el XXV Concurso Escolar de la ONCE en la categoría para alumnos con discapacidad intelectual de centros de educación especial. Coordinados por la maestra María Pérez, Francisco Javier Gilarte, José Antonio Almeida, Héctor Madrigal y Angela María Montero han diseñado este mural con el que expresan la importancia de este sistema de lectura y escritura para las personas ciegas.

A esta convocatoria nacional han concurrido 2.677 centros con la participación de casi 200.000 alumnos con el lema El braille, leer y escribir es poder vivir en igualdad . Para Proa era la primera vez, coincidiendo con la conmemoración del bicentenario del nacimiento de Louis Braille, profesor francés e inventor del este método para invidentes.

Tras dos meses de trabajo con el material que les envió la Once, los participantes han aprendido cómo funcionan medios de lectoescritura como la máquina Perkins o las regletas. Para Sixto Iglesias, director del centro, este ha sido el aspecto más importante ya que ha permitido el acceso de los alumnos a este sistema especial. "No se ha quedado solo en elaborar un cartel", subraya. Este grupo, bautizado con el nombre de Los Soñadores, está formado por jóvenes con una media de 20 años y deficiencia intelectual moderada. Ayer recibieron el premio de manos de Francisco Ordóñez, delegado territorial de la ONCE, y Juan Carlos Herguijuela, director de la Agencia Administrativa en Cáceres. "Me siento orgullosa del trabajo", decía ayer su profesora. No es para menos.