Lamentable", "penoso", "triste", "asombroso", "desastre", "debacle" o "barbaridad". Estas son algunas de las expresiones utilizadas por distintos personajes del ámbito cacereño de la música, la pintura, el teatro, la moda y en general la cultura, al conocer los problemas de continuidad del Festival de Cine Español de Cáceres y de su gala, los San Pancracio´s, por falta de financiación pública y privada, según publicó ayer este diario. La gran mayoría coincide en subrayar la escasa ayuda de las instituciones y la dificultad para conseguirla, así como el desinterés de las empresas que operan en la ciudad.

El pintor Angel Sotomayor, portavoz de Artistas y Obreros del Mundo, lamenta la situación: "Otra vez se crea un evento con la ilusión y el esfuerzo de unos ciudadanos, y cuando funciona, de nuevo se puede malograr por falta de dinero. La gente trabaja por amor al arte, pero se aburre de tanta burocracia y de tan poca ayuda privada", afirma.

Luigi Giuliani, director de El Gato al Agua, promotora del festival Irish Fleadh y profesor de la Uex, considera que las instituciones "deberían estar para apoyar y coordinar las iniciativas que ya funcionan, máxime en un caso como éste, un festival importante y consolidado. Si seguimos así no habrá 2016. Es necesario un cambio de mentalidad". El responsable de Extremúsika, Angel Romero, lo apoya: "La cultura no debe acabar nunca y el cine necesita si cabe mayores subvenciones. Es importantísimo que el festival continúe buscando más respaldos. Podría ser una marcha atrás en la Capitalidad".

LOS PRODUCTORES Charly González está al frente de La Tortuga Producciones y gestiona numerosos conciertos: "Cada vez que hablamos con las instituciones nos dicen que no hay dinero, que deben pagar deudas anteriores, y yo me pregunto, ¿quién ha malogrado esas partidas y el futuro de la cultura?". El músico y productor Paco Martín también se pronuncia: "A quienes hemos seguido los San Pancracio´s nos parece desastroso, una barbaridad, que se vayan al garete por falta de apoyo público. No se puede jugar a dos bandas: ser una ciudad con inquietud cultural y carecer de dotación para ello".

Fifí, actriz de LaBotika, tampoco ha podido organizar el Circuito Café Teatro por falta de ayuda municipal. "Ahora también están el peligro los San Pancracio´s, ¡no puede ser! Confío en que la organización lo solucione, porque es uno de nuestros escaparates para el 2016", advierte. Picki Morgado, responsable de la Asociación Teatro Estable de Cáceres, recuerda los grandes actores y directores que han pasado por el festival cacereño y lanza un SOS: "Las instituciones, las empresas, la gente... Todos deberíamos hacer algo".

Isidro Timón es el presidente del Consorcio Gran Teatro, entidad que cede la bombonera cacereña para la gala anual. "El festival debería ir a más basándose en el presupuesto del 2016. Los eventos que ya existen son los que tienen que potenciarse", opina. Esteban Cortijo, responsable del Ateneo, también cree conveniente que se facilite la continuidad de esta cita, pero recuerda que hay "otros conceptos de cultura que necesitan ayuda". "Nosotros valoramos la formación personal continuada, le dedicamos 4.500 horas al año y tenemos mucho menos apoyo", dice.

Por su parte, Marce Solís, ahora jefe de programas de Canal Extremadura Radio, fue el creador de los San Pancracio´s: "Se concibió como una cita cercana, una parodia, una alternativa, pero lo han convertido en una gala oficial y necesitan mayor presupuesto. Creo que la idea original era más acertada", opina.

MAS ADHESIONES Muchos otros, en cambio, respaldan el formato: "Me entristecería su final, como casi todo lo que ocurre en Cáceres. Se están cargando la cultura y no lo podemos consentir", declara la cantante Pilar Boyero. El modisto Leo Bernáldez cree que el certamen "es cada vez mejor" y el pianista Isidro Ortega recuerda que toda la cultura "significa progreso", por lo que le extraña la falta de apoyo. El subdirector de la Escuela Municipal de Música y componente del grupo Dixieland Jazz Band, Antonio Luis Suárez, estima que "las propuestas culturales se vienen abajo por falta de ayudas". La misma reflexión que Luis García, propietario de El Corral de las Cigüeñas: "Si una ciudad opta al 2016, primero tiene que creérselo y después apoyar lo que tiene".