Las antenas que coronan la torre de la plaza de Italia no se moverán por el momento ni tampoco existe ningún proyecto de traslado. Las continuas peticiones vecinales alertando de la sobrecarga de la torre han dado lugar a algunas iniciativas para reubicar todas las antenas repartidas por la ciudad en un mismo espacio. La última pretendía agruparlas en un terreno municipal en la Montaña, pero el desalojo de la plaza de Italia, un punto de especial concentración en pleno casco urbano, debe realizarse de mutuo acuerdo entre el ayuntamiento y Retevisión (ahora Abertis Telecom), y esta compañía finalmente no lo ha creído oportuno, según informa el Gobierno local. Por tanto, queda aparcado el proyecto de la Montaña y al menos por ahora también la ordenanza que de forma paralela regularía la anarquía actual.

La torre de la plaza de Italia fue erigida en 1929 y cedida en la década de los 50 a Retevisión para que la señal de la incipiente televisión pudiera llegar a los hogares de todos los cacereños. Aquella concesión administrativa se realizó sin plazo límite mientras durase la instalación (incluido el local anexo a la base de la torre), de modo que cualquier cambio tiene que llevarse a cabo con el visto bueno de las dos partes, máxime un traslado a otro solar municipal. Allí se ubica desde entonces un centro reemisor pero también otras antenas de telefonía a las que Retevisión ha subarrendado el uso.

INQUIETUD "En la torre no cabe nada más, es un riesgo, está sobrecargada", alertó hace un año el Partido Popular desde la oposición. "Hay grietas y además el barrio tiene miedo de las ondas electromagnéticas, aquello está saturado", subrayó el entonces presidente del colectivo vecinal, Juan Meneses. No obstante, el gobierno local anunció en ese momento a EL PERIODICO que barajaba una doble solución consistente, primero, en la reagrupación de todas las antenas dispersas por el casco urbano en una parcela municipal de la Montaña, que ya había comenzado a estudiarse, y segundo, en la redacción de una ordenanza que fijara cómo y dónde instalarlas.

Todo ello motivado por el apagón analógico. La llegada de la Televisión Digital Terrestre hizo pensar a Retevisión que las instalaciones de la plaza de Italia posiblemente no ofrecerían cobertura suficiente. "Iniciamos conversaciones ante las expectativas de un traslado, y determinamos que el lugar idóneo era la Montaña, pero al final la compañía realizó las modificaciones oportunas y sigue dando servicio desde la torre", explica el concejal de Infraestructuras, Miguel López. "Nosotros no podemos hacer nada si Retevisión no está dispuesta a cambiarse --prosigue--, y para ellos el traslado supondría un alto coste, de modo que si no les resulta necesario...".

AÑOS DE ESPERA Los vecinos comenzaron a solicitar la supresión de las antenas de la plaza de Italia en los años 90. Ya en el 2006, el gobierno del PP anunció su intención de desplazarlas al Paseo Alto. Allí pretendía crear un centro de telecomunicaciones, concretamente en el antiguo polvorín, para agrupar todas las antenas aprovechando la reforma del parque. El proyecto no se materializó y en 2009 el PP pidió al PSOE que lo incluyera en el Plan E, pero los socialistas ya estaban dialogando con Retevisión para su traslado a la Montaña, que tampoco ha cuajado.

Esta contrariedad también mantiene en suspenso la creación de una ordenanza que ponga fin a la instalación de antenas en cualquier cubierta o solar, fruto de unos avances tecnológicos que han ido mucho más aprisa que las normativas municipales. El propio ayuntamiento reconoce la necesidad de entrar a regular estas concesiones.