Su anuncio está por todas partes, puede verse en las farolas, en las paradas del autobús, pegado a una cabina... Laskar, un chamán peruano, se define como hecichero el amor que hace posible lo imposible. Ayer desconocía que estuviera prohibido fijar carteles sobre el mobiliario urbano. "No tengo ningún problema, no pego más si está prohibido", dijo.