El Ayuntamiento de Cáceres inició ayer las obras de construcción del aparcamiento en superficie del parque del Príncipe, una de las actuaciones destacadas de esta legislatura y cuyo plazo de ejecución será de cinco meses, según avanzó a este periódico el responsable del proyecto y concejal de Mantenimiento, Joaquín Rumbo.
El edil, que ayer visitó la zona, explicó que el párking tendrá una capacidad para 180 vehículos, que estará abierto durante las 24 horas y que será gratuito. La entrada del aparcamiento se realiza por la calle José Luis Cotallo y coincide con el acceso norte de la zona verde, justo donde está situada la piscina, denominada igualmente del parque del Príncipe.
La obra fue adjudicada a la unión temporal de empresas formada por Contratas Centro-Tenaos. Contará con varias bancadas adecuadas para el aparcamiento y se instalará alumbrado público de cinco metros de altura, señalización horizontal y vertical así como un cerramiento con perfilería metálica.
PLATAFORMAS Aunque en esta zona ya estaba permitido el aparcamiento, lo cierto es que estaba sin acondicionar y los coches se asentaban sobre plataformas que hasta ahora eran de tierra. La construcción de este párking supone un alivio para el entorno de Hernán Cortés, uno de los núcleos administrativos más importantes de la capital cacereña por la presencia del edificio Múltiples y de numerosas empresas, organizaciones sindicales extremeñas y el hospital Provincial. El dinero para acometer esta obra, presupuestada en 188.803 euros, se obtiene de las enajenaciones realizadas por el ayuntamiento antes del verano.
Además de este aparcamiento, el gobierno local proyecta la ejecución de otro párking en superficie junto al mercado franco. El acceso será por la avenida de la Bondad y la calle México. Igual que en el caso del parque del Príncipe, este párking también se asienta sobre una parcela municipal. La intención de Rumbo es que la zona de la Bondad disponga de 300 plazas, necesarias dada la cercanía de esta zona con el mercadillo. El terreno es un núcleo residual que quedó tras la construcción del polígono Dehesa de los Caballos.
