Y la lluvia se marchó. El tiempo dio ayer un respiro a Womad y permitió disfrutar de la última jornada de conciertos de esta 26 edición, en la que se escucharon doce bandas de cinco países diferentes. El ambiente se notó desde por la mañana, cuando salieron los primeros rayos de sol, que fueron intermitentes durante toda la jornada. Desde mediodía la gente abarrotaba ya Cánovas y la plaza Mayor comenzó a llenarse desde primera hora de la tarde. Al caer el sol ya no se cabía.

Se superaron las cifras del viernes, cuando la organización calcula que pasaron por los escenarios de Womad unas 32.000 personas, algo menos que el año pasado, edición que fue presenciada por 50.000 personas cada jornada. El viernes fue un gran día. Lo confirman los miembros de la Orkesta Mendoza: «El público respondió como nunca. Fue uno de los mejores conciertos que recuerdo», rememoraba por la mañana Sergio Mendoza, a pesar de que al principio de la actuación tuvieron problemas con el sonido.

Ayer, tercera y última jornada de conciertos en la cita multiétnica, los más esperados fueron el camerunés Blick Bassy, la israelí Mor Karbasi (última incorporación al cartel de este año), la irlandesa Sharon Shannon y los veteranos The Brand New Heavies (Reino Unido). Los encargados de comenzar la fiesta fueron los extremeños Lúa Gramer, con su pop indie noventero, en la plaza Mayor. Tras ellos Willy Wylazo, uno de los grandes del reggea en España, sobre el mismo escenario.

La israelí Mor Karbasi abrió el escenario de San Jorge, que irrumpió con su mezcla de música sefardí con flamenco. Después Sharon Shannon, sobre las tablas de la plaza Mayor, que deslumbró con su combinación de música popular irlandesa, el reggea, el cajún y ritmos portugueses. Colabora con Womad desde hace años, aunque esta era su primera vez en Cáceres. «Me encanta la oportunidad que nos da de conocer y compartir con otros artistas», decía por la mañana.

Al cierre de esta edición la plaza de San Jorge estaba llena para escuchar al dueto foclórico Los Hermanos Cubero. Quedaban por celebrarse aún las actuaciones del nigeriano Bombino, uno de los grandes representantes de la música tuareg, en la plaza Mayor, y de Blick Bassy, la nueva voz del soul camerunés y uno de los esperados de la noche. Fue en la plaza de San Jorge.

Cerraron una jornada apoteósica los veteranos The Brand New Heavies, que nacieron en 1985 y han conseguido sobrevivir desde entonces al ecléctico panorama sonoro británico, gracias a que fueron pioneros de la escena acid jazz londinense y a que se han trabajado una original mezcla de jazz, funk y soul. Fueron el broche de oro de esta edición, que terminará hoy con la celebración del pasacalles con todos los artistas, amenizado por Movimiento Santuka, a las 17.00 horas desde San Jorge.

Sobre el escenario de los extremeños, en la plaza de Santa María, tocaron ayer también K-Tólicos, Javi Dinohaurio, Kuqui Alegre y Real Jalea Pacto.

quejas por orines / La plaza Mayor era un hervidero de gente, muchos haciendo botellón. Y reinaba el buen rollo. La otra cara la pusieron los vecinos de la ciudad monumental, quienes volvieron a quejarse un año más por los orines en la vía pública, incluso en las puertas de las casas. Dejan claro que están a favor de Womad pero exigen que se controle la situación porque es desagradable. El ayuntamiento ha instalado 53 baños públicos dentro del recinto del festival, a los que deben sumarse los urinarios de los bares, pero estos volvieron una vez más a negar su entrada a los asistentes.

Al cierre de esta edición no hubo que destacar ningún incidente reseñable. Ya se había caído el sol y los womeros bailaban al son de la luna. La noche iba a ser larga.