El estado de la calle Ríos Verdes y otras adyacentes a la plaza Mayor cacereña empeora cada día. El acerado se ha levantado por completo en algunos tramos y los baches hacen difícil el tránsito de vehículos, según los testimonios recogidos entre los vecinos de la zona, que manifiestan su inquietud, además, por las grandes grietas que presentan algunas fachadas de viviendas.

Este es el mapa de situación que atraviesa esta estrecha vía que, por su situación, ha soportado durante años los excesos derivados del botellón , con ríos de orín y la presencia de numerosas pintadas en puertas y fachadas.

Estos mismos vecinos consideran que este rincón "no hace ningún favor, sino todo lo contrario, a la imagen que puede dar la ciudad de cara al visitante", principalmente en estos días de Semana Santa, durante los cuales el paso de personas es algo casi obligado para seguir las procesiones. Del mismo modo, estas fuentes critican la falta de presencia policial por las inmediaciones, a pesar de que a pocos metros, en la plaza, existe siempre alguna patrulla.

A pesar de las deficiencias, los vecinos esperan que con la entrada en vigor la nueva ley antibotellón "la situación se normalice y se pueda mejorar el actual estado de la calle de la forma más efectiva posible".