Baches, charcos, arenisca, barro... Los ciudadanos que trabajan o acuden a las empresas situadas en el polígono de la Charca Musia deben sortear varios obstáculos al volante antes de llegar a su destino. Las últimas lluvias convirtieron algunos tramos en auténticos lodazales que ralentizan y dificultan la circulación por la zona.