El Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS) aseguró ayer que la administración cacereña dispone de los mecanismos necesarios y suficientes para sacar a los indigentes de la calle, aunque insistió en que solo puede aplicar estas medidas si los sin techo acuden voluntariamente al centro. "No podemos obligar a nadie a que venga a ser atendido por nosotros, excepto si se trata de personas que padecen alguna incapacidad", aclararon.

En plena polémica por la presencia de vagabundos en el céntrico parque de Calvo Sotelo, fuentes del IMAS apuntaron a este periódico que los indigentes pueden acudir al instituto para recibir atención por parte de los trabajadores sociales, que les asesoran sobre las ayudas económicas a las que pueden optar y de las prestaciones y servicios que las distintas instituciones ponen a su alcance. Los funcionarios del IMAS también informan al sin techo de los requisitos que deben cumplir para optar a esos recursos y de la forma en que deben tramitar el papeleo.

AYUDA PSICOJURIDICA Igualmente, el IMAS insistió en que cuenta con trabajadores que asesoran a los indigentes en materia psicojurídica puesto que la mayoría de estas personas "presentan problemáticas entrelazadas" como enfermedades mentales, alcoholismo, algunos han estado en prisión, otros son drogadictos, seropositivos...

Pero además de la atención personalizada, el IMAS firma anualmente un convenio con Cáritas Diocesana para el mantenimiento del Centro de Atención de Transeúntes, al que los indigentes pueden acudir a dormir. Ese mismo convenio se firma con las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl para el comedor social del que disponen las hermanas. El instituto subraya que de esta forma los vagabundos tendrían las necesidades básicas --alojamiento y manutención-- cubiertas. "Incluso en muchas ocasiones estos centros también les dan ropa". Asimismo, el IMAS paga la factura de farmacia de estas personas.

"La mayoría no vienen aquí por vía voluntaria, algunos no quieren recibir ayuda y aunque a muchos de ellos les gustaría cambiar de vida hay que entender que son personas con muchos problemas a quienes les es difícil asumir que deben variar sus hábitos. Las problemáticas que padecen y, en muchos casos, su estado de deterioro les impiden o los limitan para acceder a los recursos normalizados", apuntan desde Asuntos Sociales.

Sobre el número de indigentes que hay en Cáceres, el IMAS indica que no cuenta con un censo puesto que "el fenómeno de los sin techo es fluctuante. Unos están de paso, otros son fijos... Es un grupo muy heterogéneo", confirmaron. Sí comentaron que los vagabundos acuden a la zona de Calvo Sotelo desde hace aproximadamente dos años, pero que su presencia en la ciudad no es nueva. "Antes se les veía más por la parte antigua o por la zona de la plaza Mayor, donde ejercían de aparcacoches".

Al IMAS no han llegado quejas de ciudadanos sobre los indigentes, pero sí las ha recibido el ayuntamiento. Ello motivó que a primeros de agosto el gobierno decidiera establecer patrullas fijas de policía local y de la brigada verde para vigilar la presencia de los sin techo en el parque más céntrico de la capital.