El Instituto Municipal de Asuntos Sociales no recibió ayer ninguna petición más de chabolistas para que se les adjudique una vivienda pública. Tampoco se han fijado aún fechas para que sean recibidos por la concejala de Asuntos Sociales, Marcelina Elviro, que ha anunciado su intención de reunirse con cada uno por separado, en ningún caso en grupo, para abordar su petición. Elviro también se ha mostrado firme en su postura de que se les trate como a cualquier ciudadano, sin excepciones en el cumplimiento de los requisitos.
Además, obligará a los 25 chabolistas que se han apuntado en una lista a justificar la urgencia y la extrema necesidad en sus solicitudes para la adjudicación directa de una vivienda. Aunque el Decreto 115/2006 de 27 de junio, por el que se regula el procedimiento de adjudicación de viviendas de promoción pública de Extremadura no precisa las condiciones exigidas "en situaciones probadas de urgente y extrema necesidad", Asuntos Sociales fija unos requisitos extra que los solicitantes deben cumplir.
Este organismo municipal, que tiene previsto citar uno a uno a los chabolistas que quieren una vivienda, tiene competencias para proponer las adjudicaciones a la Agencia Extremeña de la Vivienda tras emitir un informe favorable o desfavorable de cada expediente. Cada solicitud es evaluada por una comisión de técnicos que preside la concejala de Asuntos Sociales, que ya ha dejado claro que tendrán que cumplir todos los requisitos si quieren acceder a una vivienda de adjudicación directa. Posteriormente es la Junta de Extremadura la administración que puede acordar que se proceda a la adjudicación directa en régimen de alquiler.
El decreto que regula el procedimiento de adjudicación establece, entre otras condiciones, no haber sido resultado adjudicatario de vivienda de promoción pública ninguno de los miembros de la unidad familiar del solicitante o acreditar un período mínimo de residencia continua de tres años anteriores a la fecha de la solicitud.
