El accidente ocurrido el pasado día 13 en la barriada del Nuevo Cáceres, donde resultó herido de gravedad un vecino de 70 años al ser arrollado por un vehículo cuyo conductor dio positivo en el test de alcoholemia con más del triple de la tasa permitida, está en manos de la justicia. De la instrucción de esta causa se ha hecho cargo el Juzgado número 5, que se encontraba de guardia el día del suceso.

El titular de este juzgado, según ha podido saber EL PERIODICO, se encuentra a la espera de que la policía le dé traslado del atestado para poder abrir diligencias e iniciar el proceso judicial, en el que uno de los primeros pasos será la toma de declaración al autor del atropello.

Por lo conocido hasta ahora, aunque todo dependerá del resultado de la investigación, al autor se le podrá imputar un delito de lesiones por imprudencia grave (en este caso conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas), que el Código Penal castiga con penas de entre tres meses y tres años y la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por término de uno a cuatro años.

De producirse la muerte de la víctima, algo que su propia familia manifestó ayer con temor a este diario, "pues los médicos nos dan pocas esperanzas", al autor se le imputaría un delito de homicidio imprudente, castigado con entre uno y cuatro años de prisión y la privación del derecho a conducir por un periodo de uno a seis años.

TEMOR DE LA FAMILIA El día del trágico suceso Valentín G. Q., que el pasado miércoles cumplió 70 años, se encontraba en el parque existente junto a la rotonda que enlaza la avenida Pierre de Coubertain y la calle Juan Solano cuando G. A. S. S., de 60 años, le arrolló con su BMW.

A consecuencia del accidente, Valentín G. sufrió heridas de extrema de gravedad de las que fue atendido en el hospital San Pedro de Alcántara, requiriendose posteriormente su traslado al Infanta Cristina de Badajoz, donde ayer continuaba ingresado en la UCI, estable dentro de su gravedad, y con ventilación asistida.

Su familia, así lo indicó a este diario una de sus 8 hijos, se muestra "muy preocupada" y teme por su vida, "pues las noticias que nos dan en el hospital no son nada optimistas".

Quieren que el autor del atropello pague por lo que ha hecho, y por eso han puesto el asunto en manos de un abogado. "Queremos que se haga justicia, pues mi padre estaba perfectamente, disfrutaba de la jubilación y por culpa de un irresponsable puede quedar mal e incluso morir. Por eso la justicia debe ser dura con el autor, pues no hay que olvidar que conducía muy bebido".