La Audiencia Provincial de Cáceres ha condenado a ocho años de prisión a un acusado por abusar sexualmente de una compañera de trabajo que tiene una discapacidad psíquica, según se establece en la sentencia.

Los hechos ocurrieron cuando ambos se quedaban solos en el centro de trabajo o cuando la llevaba en su coche a su casa al ser conocido de la familia.

Los abusos tuvieron lugar entre 2010 y 2015, cuando el acusado aprovechaba que la mujer tiene una discapacidad del 33 por ciento, con capacidad cognitiva mermada con retraso mental.

El hombre, se señala, amenazaba con no llevarla a su casa si no accedía a sus deseos e, incluso, en una ocasión la llevó a un piso para cometer los abusos.

Al enterarse la familia de lo ocurrido tras dejarse la mujer el teléfono descolgado y escuchar al condenado amenazarla, denunció los hechos.

La mujer renunció a su puesto de trabajo y desde entonces, según la sentencia la sentencia, "ha mejorado su estado anímico desde que no coincide con el procesado".

Además, la Audiencia condena al acusado a no acercarse a la víctima a menos de 200 metros por un periodo de 18 años y a indemnizarla con 12.000 euros.

La sentencia no es firme y contra la misma cabe recurso ante la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx).