El ayuntamiento contratará a casi un centenar de desempleados de larga duración con cargo a la financiación del Fondo Social Europeo. Setenta y siete de los contratados reforzarán el servicio de ayuda a domicilio, un incremento que no elimina toda la lista de espera de esta prestación social, que cada vez es más demandada. Basilia Pizarro, concejala de Asuntos Sociales, calculó ayer que "unas doscientas personas" seguirán en lista de espera.

Pizarro estimó que este refuerzo es positivo, pero abogó por un incremento del servicio fijo con mayor colaboración económica de la Junta. La edil recordó que Mérida tiene las competencias, y que mientras que su intervención se ha mantenido estable en los últimos años, la del consistorio ha ido en aumento. Con este servicio fijo, que se presta con una concesión a una empresa, se atiende a unas 250 personas mayores, y con los 77 trabajadores temporales se espera dar servicio a un número superior para ir recortando la lista de espera, que ahora está en unas 800 personas.

Pizarro advirtió de que estos servicios son cada vez más demandados, insistió en que "está bien" tener más personal, pero recalcó que para atender a este colectivo, personas mayores que en muchos casos están solas, se requiere "una continuidad" porque los cambios, a causa de la temporalidad de los contratos, que son de un año, acaban "por desconcertar a los mayores".

BRIGADA Los concejales Francisco Javier Castellano y Luis Martín informaron ayer de que se contratará a 97 desempleados de larga duración, que los contratos tendrán que estar formalizados el día 10 y que desde el Sexpe se ha remitido un listado de demandantes del que saldrán los 97 desempleados que se contratarán. Castellano indicó que diez de estos trabajadores se destinarán a una brigada de actuación en barrios para obras puntuales, mientras que otro grupo de trabajadores se dedicarán a labores medioambientales, formando parte de lo que el concejal llamó "una brigada verde".