El ayuntamiento recortará el importe de sus operaciones de crédito a corto plazo (las operaciones de tesorería que son a un año), pero incrementará el saldo de las operaciones financieras a largo plazo para afrontar la deuda con proveedores y para sufragar parte de las inversiones de los presupuestos. De momento, la Comisión de Economía votó ayer a favor de concertar un crédito a un año por valor de 5,4 millones y la idea de Lorenzo de la Calle, concejal de Economía, es que se alcance un acuerdo de intermediación con una entidad bancaria para el pago a los acreedores a corto plazo, en especial a pequeños proveedores, una operación de endoso que sería de unos cinco millones, según el cálculo hecho ayer por el edil.

La operación de tesorería dictaminada ayer es para el anticipo de fondos que deberá aportar la UE una vez presentada la certificación de las obras y para cubrir las necesidades transitorias de tesorería. El consistorio tiene ahora en vigor otras dos operaciones a corto plazo, ambas por 4 millones de euros y contratadas con la Caja de Extremadura. De la Calle indicó que la intención del gobierno es refundir estas dos operaciones en la dictaminada ayer por 5,4 millones y que se debe contratar.

Para afrontar deuda con los acreedores, el concejal reiteró que por un lado se buscará un acuerdo de intermediación con una entidad bancaria que adelantará el pago de la deuda que tiene el consistorio con los pequeños proveedores, dinero que el ayuntamiento repondrá a la entidad en el plazo y condiciones que se acuerden, y por otro se negociará una concesión de quita y espera con los grandes acreedores que tiene el ayuntamiento, entre los que están las principales empresas concesionarias de servicios públicos.

Sería la segunda vez que el ayuntamiento recurre a una operación de endoso. La anterior se contrató con Caja de Extremadura en la anterior legislatura.

El concejal recordó ayer que además de las operaciones citadas (tesorería, endoso y quita y espera), faltaría el pago de lo que se debe a las agrupaciones de interés urbanístico por la urbanización de polígonos y en expropiaciones. De la Calle comentó el pasado jueves que el débito a los acreedores a corto plazo era de 48 millones de euros, según el balance de situación del ayuntamiento a final del 2006. No todo este dinero se adeuda a proveedores, empresas o agrupaciones, dado que es el apunte contable en el balance con el total de débito por todos los conceptos.

PARAISOS FISCALES De la Calle reiteró que en anteriores gobiernos se optaba por tapar los ojos y no hacer frente a la deuda a corto plazo, a la que ahora se quiere dar una respuesta "poco a poco" y "sin asfixiar" al ayuntamiento, motivo por el que una de las soluciones es el recurso a las operaciones financieras a largo plazo.

De la Calle también aludió ayer a la posibilidad de que parte de las inversiones de los presupuestos se afronten con una operación de crédito a largo plazo, además de con la venta de patrimonio municipal de suelo para los casos que permita la ley.

Por otra parte, el edil se reunió ayer con diputados provinciales del área económica (la diputación lleva la recaudación municipal). Entre los asuntos tratados estaba la revisión de los censos de impuestos y tasas para evitar "los paraísos fiscales que se dan en Cáceres". "No es normal que unos estén pagando y que otros se estén escapando", precisó.