En el ayuntamiento se votó ayer por primera vez sobre el proyecto de la mina en Valdeflores. Fue en la comisión de Urbanismo, que dictaminó en contra de la propuesta de Tecnología Extremeña del Litio (TEL) de modificar el plan de urbanismo, cambio necesario para que en Valdeflores se autoricen los usos extractivos. Sin el cambio de esta norma, la mina no es posible. La decisión de la comisión, que es un órgano informativo, será refrendada el jueves en el pleno de la corporación. Cuando lo haga, el proyecto estará bloqueado en el ayuntamiento. Además por lo dicho en febrero por la titular de Medio Ambiente, Begoña García, sin el cambio del plan no es posible que su consejería dé la autorización ambiental.

Esto no supone el fin del proyecto. En la dirección general de Minas se sigue con la tramitación de la concesión de la explotación, que no se podrá dar sin la autorización ambiental, además queda la posibilidad de que la empresa recurra en los tribunales la negativa del ayuntamiento de modificar el plan. David Valls, director técnico de TEL, aseguró ayer que la judicial es «la última alternativa» y que no se tomará una decisión hasta que el pleno se haya pronunciado. Además insistió en que se debe permitir que el proyecto llegue al trámite ambiental y apoyó su petición en el informe jurídico redactado por el servicio municipal de Planeamiento sobre la modificación, en el que se apunta que la tramitación del cambio del plan deberá ser objeto de evaluación ambiental estratégica. El argumento de la empresa es que no hay ninguna figura ambiental que motive la protección de la zona y que hay unos usos mineros existentes que el plan de urbanismo no recogió por error.

NO ADMITIR / Con su dictamen, la comisión acordó no admitir a tramite la modificación y se apoyó en argumentos del informe técnico y del jurídico, entre éstos --de los que informó este diario el miércoles-- figura que la mina va en contra del modelo de ciudad que se acordó cuando se aprobó el plan, modelo que protege la sierra de la Mosca, donde está Valdeflores, por ser un pulmón natural de Cáceres, además se cuestiona que para dar viabilidad a la mina se elimine la distancia mínima con un núcleo urbano, que ahora es de dos kilómetros, lo que dejaría la mina a menos de dos mil metros de las 500 viviendas del Residencial Universidad y del nuevo hospital.

PP, PSOE y CACeresTú (Podemos) votaron en contra de la modificación. Cs mantuvo su abstención. «Nos reservamos el voto para el pleno (...) estamos todavía viendo los informes municipales y el trámite que se sigue en la Junta», explicó Antonio Ibarra, edil de Cs.

Con Cs se reunió ayer la plataforma Salvemos la Montaña. «Ha sido la primera», apuntó Antonio Cortés, uno de sus portavoces, que se mostró satisfecho porque «ya nos hemos reunido con todos los grupos políticos», pero «defraudado» por no obtener de Cs un compromiso de que no apoyará el proyecto. Por la mañana la plataforma se reunió con la presidenta de la diputación, Rosario Cordero, que abogó por cumplir toda la tramitación del proyecto, aunque, según fuentes de la institución, apuntó que si los cacereños no quieren una mina al lado de la ciudad, no tiene sentido seguir hablando del proyecto. Desde la plataforma se hizo ayer un llamamiento a la ciudadanía para que participe en la manifestación de este sábado. Sale a las 18.00 horas de la plaza de América (Cruz de los Caídos).