La XVIII edición del Festival de Teatro Clásico comenzará el 15 de junio, pero el Consorcio Gran Teatro aún no ha podido cerrar el programa porque no tiene la cesión oficial de la plaza de San Jorge (principal escenario junto con las Veletas). El problema estriba en que desde hace dos años la Fundación Mercedes Calles explota por concesión municipal una cafetería en los locales de esta plaza, a la que no se puede «ni exigir ni imponer el cierre o el acceso», según el ayuntamiento. El pasado año, el graderío y el escenario prácticamente impidieron la entrada a la cafetería durante diez días. No obstante, la fundación se extraña de este «revuelo» porque «no nos han comunicado ningún problema».

El asunto se trató ayer en la Comisión de Cultura. A preguntas de la oposición, el gobierno local explicó que se han tramitado las solicitudes del Festival de Teatro, «como se hace con todos los eventos», y que ya se ha concedido «autorización para las Veletas», afirmó en una nota. Respecto a San Jorge, «existe un establecimiento que está realizando una explotación a la que no se puede ni exigir ni imponer el cierre o el acceso (según informes técnicos). Ante esta circunstancia se ha informado al Gran Teatro para que ambas partes busquen un acuerdo. El ayuntamiento se ha ofrecido para mediar, por el interés del evento y por formar parte del patronato del Gran Teatro», subraya la misma nota, donde se reconoce que el escenario impide el paso a la cafetería. En cambio, la terraza exterior sí puede suprimirse al contemplarlo la ordenanza.

Por su parte, la directora del Consorcio Gran Teatro, Silvia González, recibió el miércoles una notificación municipal sobre este asunto. «Si efectivamente no hay ninguna cláusula ni acuerdo establecido, salvo que sea de mutua voluntad, nos gustaría que tuviese lugar un entendimiento entre el ayuntamiento, propietario de los locales, y la Fundación Mercedes Calles, para resolver esta situación y contemplar la realización de los espectáculos (...) Yo no tengo ningún problema en ponerme de acuerdo y en hablar todas las veces necesarias, ya lo hicimos el año pasado», indicó ayer Silvia González. «Apelamos a la fundación, puesto que la promoción de la cultura y de la ciudad están en sus fines fundacionales. Yo creo que hay voluntad», subrayó.

De hecho, fuentes de la Fundación Mercedes Calles expusieron ayer su disposición a solucionar este asunto. «De hecho, basta con que se respete la fórmula de coexistencia que se acordó el año pasado, y que no se cumplió. Nuestro deseo es que se celebre el festival para bien de la ciudad, pero que también se respete razonablemente a la cafetería y a sus diez trabajadores», explicaron ayer desde la fundación, que en la última edición tuvo que cerrar todas las tardes, y tampoco se podía acceder por las mañanas.

Según ha sabido EL PERIÓDICO, estos días tendrá lugar un encuentro para llegar a un acuerdo.