El portavoz del gobierno, Rafael Mateos, respondió ayer a los que piden que se negocie con Tecnología Extremeña del Litio (Sacyr y Plymouth Minerals) que «se lean el proyecto, en el que se dice claro que lo que se pretende es una mina a cielo abierto y una planta que utiliza un proceso metalúrgico para obtener carbonato de litio». Añadió que esto es lo que se ofrece en el documento y que «en ningún caso se contemplan industrias auxiliares o asociadas a la extracción y tampoco ningún tipo de industria de transformación». Agregó que el gobierno tiene «serias sospechas de que lo que quieren es llevarse el carbonato de litio y dejarnos el agujero».
Mateos aseguró que al gobierno local le ha generado «más dudas» la intervención del consejero de Economía, Jose Luis Navarro, ante el pleno de la Asamblea y añadió que por lo escuchado «Navarro parecía más un asesor y consultor de Sacyr que un consejero de la Junta». El portavoz apuntó que el consejero no explicó si existe alguna vinculación entre la mina de Aguablanca y el proyecto de Valdeflores, «la primera no tenía viabilidad y Sacyr se quedó con ella, por lo que la pregunta que debió de haber respondido el consejero era si a cambio de quedarse con Aguablanca hubo el compromiso de concederle la explotación» de Valdeflores.
PLATAFORMA / La Plataforma Salvemos la Montaña mostró ayer su decepción con la intervención de Navarro y advirtió de que en este proyecto, iniciado por Sacyr y al que luego se añadió Plymouth, ambas están en Tecnología Extremeña del Litio, se puede dar lo ocurrido en otros en los que se han acabado diluyendo las responsabilidades frente a los inconvenientes y la restauración del espacio de tal forma que «se han socializado las pérdidas ambientales, cuando antes se habían privatizado las ganancias económicas».
