El Ayuntamiento de Cáceres ha iniciado un procedimiento administrativo para reclamar a la empresa Acciona 4.296.010 euros por incumplimiento del contrato integral del agua, un servicio que la compañía prestó para la ciudad desde el 1 de enero de 2012 hasta el 31 de marzo de 2015, cuando por mandato judicial se volvió a adjudicar la contrata por defectos en la primera concesión, la cual volvió a manos de Canal de Isabel II, la actual adjudicataria.
Entonces, Acciona reclamó al consistorio cacereño una cantidad cercana a los 10 millones de euros por liquidación del contrato pero el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 2 de Cáceres desestimó el pasado mes de diciembre la liquidación reclamada por la empresa. La sentencia sugería, además, al ayuntamiento cacereño que reclamara una cantidad de 3,9 millones de euros por "incumplimiento" por parte de la empresa de algunas cláusulas del contrato mientras estuvo en vigor.
Así las cosas, el portavoz del equipo de Gobierno local, Rafael Mateos, ha anunciado este viernes que se va a proceder a esa reclamación por la vía administrativa basándose en esa sentencia y en un informe elaborado por los servicios municipales de Inspección que aconseja pedirle a Acciona la cantidad de poco más de 4,2 millones de euros.
En concreto serían 1,8 millones por inversiones obligatorias que la empresa debería haber hecho durante el tiempo que estuvo prestando el servicio y que no realizó; 2,5 millones de euros son de recibos pendientes de basura y del canon no satisfecho a la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), y unos 700.000 euros de maquinaria, utillaje y "otros daños" que también debe resarcir la empresa, a juicio de los técnicos.
A estas cantidades se debe sumar otro millón de euros que el ayuntamiento cacereño reclama a la empresa por "deficiencias" en la prestación del servicio y cuyo expediente ya se está tramitando en el servicio municipal de Contratación. Por lo tanto, según ha especificado Mateos, serían más de 5 millones de euros lo que el consistorio cacereño reclama a la anterior adjudicataria del servicio integral del agua en la ciudad.
Ahora se abrirá un proceso negociador con la empresa en el que Mateos espera que "haya voluntad de acuerdo" y, de no ser así, no se descarta acudir a la vía judicial para reclamar la cantidad que el ayuntamiento cacereño estima que le pertenece tras la resolución del contrato con Acciona.
Cabe recordar que todo este proceso se remonta al año 2011 cuando se adjudica la contrata del agua a Acciona, que empieza a prestar sus servicios el 1 de enero de 2012. Otras empresas que concurrieron presentaron varios recursos al entender que había habido defectos en la adjudicación y Canal de Isabel II, la anterior adjudicataria, consigue que el concurso tenga que retrotraerse al momento en el que se valoraron las ofertas económicas, lo que arroja una nueva puntuación que inclina la balanza a favor de Canal de Isabel II, que finalmente recupera la contrata.
Acciona prestó el servicio hasta el 31 de marzo de 2015 cuando se produce la nueva adjudicación y es entonces cuando esta empresa inicia un proceso judicial contra el ayuntamiento cacereño al que le pide 9,9 millones de euros en concepto de liquidación del contrato e indemnización por los daños y perjuicios que le supone la rescisión. El juzgado desestima ese recurso y la situación se torna contraria ya que es el Ejecutivo cacereño el que reclama ahora a la empresa.
