El pleno del ayuntamiento aprobó ayer la moción presentada por el grupo municipal del PP, que está al frente del gobierno local, en la que se solicita a la dirección general de Minas de la Junta de Extremadura «la remisión de cuanta documentación e información obre en su poder relativa a la explotación de la mina de Valdeflores». En otro de los acuerdos de la moción se insta a la Junta a que, aun siendo la competente, no otorgue licencia alguna «hasta que no sea sometida a conocimiento de este ayuntamiento».

La propuesta se presentó con carácter de urgencia y como reacción al anuncio hecho un día antes por la directora general de Industria, Energía y Minas, Olga García, que aseguró que Tecnología Extremeña del Litio presentó el 10 de octubre sendas solicitudes de concesión de explotación de la mina de Valdeflores que derivan de los dos permisos de investigación minera dados a la empresa (el primero lo solicitó Sacyr).

La moción se aprobó por unanimidad. Todos los portavoces de los grupos políticos coincidieron en la necesidad de que se dé transparencia a la información de este proyecto por su trascendencia y el debate generado.

Tecnología Extremeña del Litio está participada por Sacyr y Plymouth Minerals. Tras los dos permisos de investigación concedidos, el último el 4 de mayo, la empresa ha dado este mes el paso siguiente: solicitar las concesiones de explotación derivadas de las dos autorizaciones. Ha entregado el primero de los documentos que deben acompañar a las solicitudes: una instancia que, según el reglamento para el régimen de la minería, debe designar el terreno solicitado que deberá estar dentro del otorgado en los permisos de investigación. Respecto al resto de los documentos necesarios, «los presentará en un plazo máximo de tres meses», según se indicó ayer desde la Junta.

El reglamento fija un plazo de tres meses a contar desde la fecha de presentación de la solicitud. Después de la fiesta de Reyes deberían estar en la dirección general de Minas, entre otros documentos, los informes con los resultados de las investigaciones realizadas, el estudio económico de rentabilidad, las fuentes de financiación o el proyecto de aprovechamiento del recurso.

Hasta ahora la única documentación que se está haciendo público por Sacyr y Plymouth Minerals son los informes que la empresa australiana publica en su web. El último, un estudio de alcance, hace una previsión sobre los pasos a seguir hasta que se inicie la producción: son tres años. El objetivo para este trimestre es el estudio de alcance. Para 2018 se prevé tener completados los estudios de viabilidad, los permisos y la financiación. Para 2019 se proyecta la construcción. Durante la segunda mitad de 2019 y la primera de 2020 se planifica la puesta en marcha y la producción a partir del tercer y cuarto trimestre de 2020. Los datos del estudio son por ahora estimaciones, según se precisa en su texto, que se tienen que perfilar en informes posteriores. Sí confirma que en la zona y próxima entre una y otra habría una mina a cielo abierto para la extracción de carbonato de litio, una planta para procesar el mineral y una zona de vertedero de residuos. En el estudio de alcance se estima que el coste de la actuación ascendería a 230 millones (11,9 en la mina, 198 en la planta y en las infraestructuras y 21 para el fondo de contingencias). En otro de sus apartados se afirma que la operación tiene una vida útil de 24,1 años con la puesta en marcha de la planta en el año 2.