El portavoz del equipo de gobierno, Andrés Nevado, confirmó ayer que el agua que llegue a La Mejostilla no tendrá cal, una vez que concluyan las obras de mejora de la red de abastecimiento que el consistorio está desarrollando en la barriada cacereña.

El concejal, que insistió en que "se solucionará el problema de la cal", comentó que la comisión dio el visto bueno a una certificación por valor de 116.000 euros correspondiente a las obras de ampliación de la estación depuradora de agua potable y otra de 67.000 euros para la mejora de la red de saneamiento de agua de Aldea Moret. "Es una cuestión de solidaridad", dijo Nevado.

Por otro lado, el edil informó de la futura firma de un convenio que el ayuntamiento realizará con el Ministerio de Asuntos Sociales, Trabajo y la Fundación ONCE para elaborar un plan de accesibilidad de la ciudad, tanto en la parte antigua como en el resto de la capital cacereña.

Previamente, el consistorio realizará un proyecto para conocer con exactitud la situación actual de las barreras arquitectónicas. El ayuntamiento sólo tendrá que abonar el 15% de los gastos de ese plan. El resto será presupuestado por las instituciones que forman parte del convenio.