El ayuntamiento acordó ayer dar un paso más en la normalización de la calle Ródano y especialmente en la situación del Bloque B, del que pretenden evitar que se convierta en nuevo foco de conflicto en la zona. Los representantes de las concejalías de Asuntos Sociales, Infraestructuras y Seguridad Ciudadana mantuvieron ayer una reunión de trabajo para evaluar la finalización del proceso de realojos que se han llevado a cabo con los vecinos que vivían en situación legal en el Bloque C y a los que se ha ubicado en otros pisos de titularidad municipal. El consistorio está además a la espera de que concluya el proceso judicial que se inició contra los inquilinos ilegales de este inmueble, que se niegan a abandonarlo.

Dentro del proceso de normalización, se ha acordado que la concejalía de Asuntos Sociales continúe trabajando en colaboración con las policías local y Nacional, para que se mantenga la convivencia ciudadana y la protección del patrimonio municipal, que constituyen estos bloques de viviendas. Además se van a solucionar los desperfectos que existían en el Bloque B y se individualizarán los contadores de agua para que cada vecino se haga cargo del pago de lo que consume.

La portavoz del grupo municipal del PP, Elena Nevado se refirió ayer a esto y criticó a la edil del Asuntos Sociales, Marcelina Elviro, de actuar de forma "totalitaria" al pretender que "por la fuerza, las familias de ilegales dejen el Bloque C", aseveró.