El gobierno municipal mantendrá el próximo miércoles una reunión de trabajo con responsables de la Consejería de Igualdad y Empleo y la Delegación del Gobierno en Extremadura "para ultimar el realojo" de las familias del bloque C de la calle Ródano, en Aldea Moret.

El encuentro servirá también para elaborar "un informe y hacer una puesta en común de lo que hemos hecho desde el 2007 en Aldea Moret", según explicó la concejala de Asuntos Sociales, Marcelina Elviro, que compareció ayer para dar explicaciones sobre el proceso iniciado para vaciar el edificio y defender la actuación del equipo de gobierno: "En dos años de legislatura no se puede hacer más porque los procedimientos administrativos son los que son", subrayó la edil, que culpó al anterior gobierno del PP de la situación en este inmueble de viviendas sociales de titularidad municipal, en unas condiciones pésimas y donde residen todavía 13 familias.

LOS DATOS Elviro aseguró, citando un informe del Instituto de Asuntos Sociales del pasado 27 de febrero, que ya se han completado los expedientes de diez familias para trasladarlas a otras viviendas en la barriada, en proceso de reforma por la empresa Correa Carballo a la que el ayuntamiento adjudicó estos trabajos. Añadió que otras seis se encuentran en trámites para formalizar la compra-venta de pisos y cinco están en situación ilegal.

La concejala avanzó que la intención del equipo de gobierno es "terminar con este problema a principios de este verano" y apuntó que "se trata de un objetivo prioritario". Recordó que el ayuntamiento realizó los primeros realojos en diciembre del 2007 y que el proceso se ha ido retrasando ante las dificultades para localizar a los adjudicatarios iniciales. "Se adjudicaron viviendas por resolución de alcaldía a personas que no sabemos dónde viven y que no encontramos en el país. Este proceso va lento, es trabajoso y afecta a terceras personas. Este gobierno municipal ha sido prudente, Hay que hacerlo bien y con sentido común", subrayó Elviro, muy crítica con la gestión de la anterior responsable del área de Asuntos Sociales, Basilia Pizarro: "¿Le va a dar una solución a los vecinos cuando no se la dio en su día? Estamos trabajando y lo vamos a arreglar. Es un problema que hemos heredado".

En cuanto al uso que tendrá el edificio, insistió en que "está pendiente de un informe de los servicios técnicos para saber si se puede rehabilitar" y defendió la labor de los trabajadores del Instituto Municipal de Asuntos Sociales. "Si hay un área que no he abandonado nunca es el de vivienda", concluyó.