El presidente de la asociación de vecinos de Nuevo Cáceres, José María Tovar, afirmó ayer que la ruptura de las negociaciones entre Pinilla y Leclerc es una mala noticia para el barrio porque significará un nuevo retraso en la construcción del centro comercial proyectado, una instalación que "urge que se construya". El presidente vecinal justificó esta necesidad con un dato: "en Nuevo Cáceres residen 9.500 vecinos", a lo que añadió que en Cáceres hay "un desequilibrio" en la oferta comercial significativo, ya que se concentraría principalmente en el oeste. Aquí están los dos híper (Carrefour y Eroski) y tres supermercados (Lidl, Dia y Supercor, que está en ejecución).

El portavoz del gobierno municipal, Andrés Nevado, también aludió ayer a la densidad de población que hay en el sur de la ciudad. "Es una zona demográficamente importante para que se lleve a efecto lo que estaba diseñado --en el plan general de urbanismo--, que es la instalación de una dotación comercial".

Nevado y Tovar no realizaron valoraciones sobre la ruptura de las negociaciones entre Pinilla y Leclerc. "Lo respetamos", indicó Tovar, mientras que Nevado recordó que el gobierno local "no conoce oficialmente la decisión, sólo por los medios de información". El portavoz sí apuntó que la posición del ayuntamiento es que "ahí debe haber una superficie comercial", con independencia de quién sea el promotor.

Nevado añadió que la parcela de Nuevo Cáceres es "un sitio adecuado, por eso figura en el planeamiento como --uso-- comercial" para que los que residen en este polígono y en otros cercanos tengan una gran superficie "cerca de sus domicilios".

EFECTOS El presidente de la asociación vecinal comentó que el retraso en el desarrollo del suelo comercial de Nuevo Cáceres tendrá una repercusión negativa sobre negocios que optaron por instalarse en la urbanización "pensando en la apertura del centro comercial". Tovar apuntó que antes de que se hiciese pública la noticia de la finalización de las relaciones entre Pinilla y Leclerc ya hubo empresarios que se dirigieron a la asociación vecinal para "a ver de qué manera se podía acelerar" que el centro comercial abriese.

El presidente vecinal añadió que la apertura de la gran superficie no sólo sería significativa por el incremento de la oferta comercial, sino además por la de los espacios "de ocio y esparcimiento". Tovar, al que acompañaba el vicepresidente de la asociación, Fernando Palacios, recordó que la edad media de la población de Nuevo Cáceres está "entre los 40 y los 45 años".

La intención del grupo Pinilla, propietario de la parcela, es contactar con otro operador del sector de la alimentación que gestionaría el híper de un centro comercial que se mantendría con características similares al proyectado (galería comercial con tiendas y ocio). No obstante, para desarrollar este proyecto tendrá que solicitar una nueva licencia a la Junta con estudio de mercado de la oferta y demanda.