La concejala de Participación Ciudadana, Carmen Lillo, detalló ayer el reparto de las subvenciones que concede el ayuntamiento y adelantó propuestas que se recogen dentro del borrador del reglamento de Participación Ciudadana, que abre la puerta a la intervención de colectivos y ciudadanos en los plenos. La concejala matizó que se repartirán entre 55 colectivos 250.000 euros. La distribución se hace en cuatro grandes grupos (asociaciones de vecinos, colectivos con un objetivo social, organizaciones no gubernamentales y colectivos y hogares de mayores) y estas ayudas son las del ejercicio del 2007.

Carmen Lillo también se refirió al plan de barrios, un programa de actuaciones que salen de las necesidades que han demandado los colectivos vecinales en sus contactos con el consistorio. En este plan aparecen cada una de las asociaciones y sus demandas se reparten entre diez apartados (juegos infantiles, señalizaciones, jardines, pistas deportivas, limpieza, transporte, saneamiento, alumbrado, sedes vecinales y obras). Este plan marcará parte de las inversiones a ejecutar por el ayuntamiento en la legislatura, muchas de estas demandas son de obras de escaso volumen que se afrontarían con recursos propios del consistorio, como, por ejemplo, la brigada de obras, mientras que otras dependerán del capítulo 6 de inversiones de los presupuestos.

Por ahora, el gobierno municipal no ha detallado qué cantidad irá a inversión en los presupuestos del 2008, aunque sí ha incidido en que habrá una plurianualización de las principales inversiones, que no solo saldrán del plan de barrios, sino también de infraestructuras que afectarán a más de una barriada. No obstante, lo primero que tendrá que definir el gobierno es de dónde van a salir los fondos para estas inversiones, ya que los resultados por la venta de suelo están condicionados por la ley regional y el recurso de las operaciones de crédito incidirá en el endeudamiento a largo plazo. En los últimos presupuestos se ha apostado por la venta de suelo, aunque los resultados han sido mínimos: se han culminado muy pocos expedientes y una gran parte de la inversión no se ejecutó.

Lillo indicó ayer que todavía se tiene que cuantificar el coste total de las actuaciones que se meten en el plan de barrios. No obstante, su coste podría rondar una cantidad superior a los cinco millones de euros.

JORNADAS En cuanto al borrador, Lillo adelantó que habrá unas jornadas con los colectivos vecinales para que realicen sus aportaciones. El borrador marca los distritos en los que se divide la ciudad y la participación de los ciudadanos y colectivos en los plenos. La concejala indicó que para intervenir en los plenos, cuando sean asuntos de urgencia, habría que pedirlo con 24 horas de antelación. El interesado intervendría en primer lugar, después se iniciaría el debate político y a continuación se votaría el punto del orden del día en cuestión.