Los problemas que atraviesa el sector cacereño del taxi y los paros anunciados para los últimos días de septiembre, así como el cierre de la emisora con sus cinco empleadas, podrían solventarse si finalmente prospera la buena voluntad que ayer manifestaron los profesionales del gremio y la Administración. Tras la información publicada por este diario en la que los taxistas anunciaban protestas por el estancamiento de las tarifas desde hace tres años, el ayuntamiento se mostró ayer favorable a llegar a una solución y el sector está dispuesto a resolver la situación por medio del diálogo.

"Vamos a convocar una reunión con los responsables porque no les falta razón en sus peticiones, especialmente por la fuerte subida del combustible. Lo que ocurre es que se han producido problemas con los informes elaborados por el sector al solicitar la subida del IPC, de forma que buscaremos el modo de solucionarlo", explicó ayer Andrés Nevado, portavoz del equipo local de gobierno y nuevo concejal de Economía y Hacienda, que pide "un pequeño margen" para estudiar a fondo la cuestión ya que apenas lleva unos meses al frente del área.

Las tarifas del taxi no se han incrementado desde el 2002 y ni siquiera se ha actualizado el IPC de los años 2002, 2003 y 2004, sin contar el 2005, que tendría que aplicarse a partir del próximo ejercicio. Los profesionales aseguran que han perdido un 10% de su poder adquisitivo al margen de la subida del combustible, calculada en un 40% en sólo año y medio. Por ello, el sector había previsto realizar movilizaciones a finales de este mes y cerrar la emisora de Radio Taxi, donde trabajan cinco asalariadas, ya que asegura que no puede mantener este servicio que supone un coste de 60.000 euros anuales. Sus demandas se centran exclusivamente en el IPC, "nos daríamos por satisfechos", indica Segundo Martín, vicepresidente de la Agrupación Provincial de Autónomos del Taxi.

DEFICIENCIAS DE FORMA La competencia final para aceptar estas subidas corresponde a la Comisión Regional de Precios de la Junta de Extremadura, del mismo modo que las tarifas del autobús urbano. Sin embargo, necesita la previa aprobación del ayuntamiento cacereño, que antes debe aceptar un informe económico no vinculante elaborado por el propio sector del taxi. En este sentido, Nevado explicó ayer que el informe remitido en el año 2004 para pedir el aumento del IPC no ha podido ser solventado por los servicios técnicos municipales, ya que presentaba ciertas deficiencias.

"Vamos a reunirnos con el sector para analizar la forma de hacer un nuevo estudio y solucionarlo, porque nuestra intención es dar satisfacción a todos. Escucharemos sus planteamientos", dijo ayer el concejal. Según Andrés Nevado, "las demandas de los taxistas nos parecen razonables, sobre todo por la subida de los gastos que ha supuesto el encarecimiento del carburante. Resulta lógico que soliciten una revisión de su situación".

LAS TASAS El gremio emplea a unos 100 trabajadores (72 licencias y 20 asalariados), y sus tarifas figuran entre las más baratas, según los profesionales. El vicepresidente se mostró ayer satisfecho y esperanzado por la voluntad del ayuntamiento. "Nuestra última opción son los paros y el cierre de la emisora, no queremos perjudicar a nadie ni llegar a ese extremo. Parece que estamos en buen camino", dijo.