TMti amigo Juanma abrió una cuenta en una entidad de ahorro, cuyo nombre no importa porque en todos sitios cuecen habas, ingresando 120 euros.

Como son tan espléndidos, le dieron una tarjeta de débito y todo. Hasta el día de hoy no ha hecho ningún movimiento. Puesto que sus circunstancias han cambiado y considera que ya no le interesa mantener la cuenta, se ha personado en la sucursal para cancelarla. Le actualizan la cartilla y comprueba que un día le hacen un cargo de 18 euros por mantenimiento.

En diciembre del mismo año otro de 9 euros por la tarjeta. Unos días después un tercer cargo de 18 euros por mantenimiento. Además tiene otros dos cargos de 0,06 y 0.05 euros por impuestos. Pero como no todo van a ser disgustos le han hecho dos ingresos, uno de 0,067 y otro de 0,05 euros por intereses. Total que de los 120 euros le quedan 75.09. Y eso sin cancelar la cuenta, que vale 17 euros.

Ahora se explica uno que la economía vaya mal. La de Juanma, naturalmente. Y no hable usted de robo porque todo es legal. Diga más bien que usted es un pardillo que no lee los contratos que firma. Con esta manera de hacer cuentas es imposible que los bancos vayan mal. ¿No será que los banqueros son insaciables y bastante chapuceros?