La plaza Mayor se convirtió ayer en un pequeño centro de artesanía. Una veintena de artesanos extremeños instalaron otros tantos estands con sus productos: vidrio pintado y velas artesanales, bisutería, miniaturas de forja, figuras de hueso de melocotón, artículos de cuero y pinturas. Por haber, había hasta un puesto de castañas y un taller de malabares. En éste último --uno de los más concurridos-- lo más pequeños se entretuvieron con juegos tradicionales como monociclos, diábolos o platos chinos.

Esta actividad está organizada por la Asociación de Empresarios Pintores-Monumental y nace con la aspiración de consolidarse en el tiempo. La presidenta de este colectivo, Pilar Jiménez, explicó que el mercado se "institucionalizará" y se celebrará el último sábado de cada mes. El objetivo es que la cifra de expositores alcance la treintena en poco tiempo.

Pilar Jiménez afirmó que esta iniciativa --que completa el programa de actividades que desde hace tiempo viene desarrollando la asociación de empresarios-- pretende ofrecer a los cacereños y visitantes la oportunidad de "pasar un día de forma diferente", al mismo tiempo que se fomenta la afluencia de público a la parte monumental de la ciudad y se revitaliza la zona.

La presidenta de los empresarios confió en que los ciudadanos --como ya han hecho en otras ocasiones-- respondan a esta iniciativa edición tras edición en la que han puesto esfuerzo y trabajo.