Jacoliva es una firma familiar cuyos orígenes se remontan al menos a 1868. Primero de forma discontinua, y desde la década de los 70 como actividad empresarial, este sello vende cada año un millón de litros de aceite de oliva virgen extra envasado. Lo hace desde el municipio de Pozuelo de Zarzón, donde aprovecha todas las bondades de la aceituna manzanilla cacereña. «Como complemento a esta producción y aprovechando los recursos de calidad que nos proporciona la naturaleza, entendimos interesante crear cosméticos con aceite de oliva virgen extra, y así nació nuestra marca, Olivaolivae», explica Justino Corchero, gerente.

Ofrece dos familias de cosméticos: convencional y biológica con certificado ecológico. La primera, con una trayectoria de quince años, incluye productos básicos como jabón natural de tocador, crema de manos, crema facial, leche corporal, crema de pies y exfoliante con hueso de aceituna como ingrediente... Todos incorporan a su formulación aceite de oliva virgen extra de cultivo ecológico, pero también otros ingredientes naturales. «Por ejemplo, en el gel de baño utilizamos avena; en la leche corporal, caléndula, rosa mosqueta o aloe vera; en la crema de manos, urea o manteca de karité; y en la crema de pies, árbol de té o rosa mosqueta, todos ellos con mucha aceptación», subraya el gerente, cuarta generación de la empresa familiar.

La línea con certificación ecológica se comercializa desde finales de 2015: crema facial, leche corporal, crema de manos, un rollón muy eficaz contra golpes y picaduras basado en las propiedades protectoras del aceite...

En total, unos quince productos cuya venta se realiza aprovechando los canales de comercialización del aceite de Jacoliva, normalmente en tiendas de productos gourmet y de productos de la tierra. También llegan a través de la exportación a destinos como Emiratos Árabes Unidos, China, Suiza, Francia, Alemania... Todos están disponibles de forma on line en ‘www.jacoliva.com’.