"Hacer desaparecer un árbol de 200 años es fácil; la idea es que hacerlo crecer sea igual de fácil". Con esta filosofía se inicia el proyecto Siembra una bellota , que ayer presentó el presidente de la Mancomunidad del Tajo-Salor, Santos Jorna, junto a Gregorio Tovar, promotor de la iniciativa.

Para la campaña se han editado 5.000 folletos, acompañados en una bolsita con dos bellotas --10.000 en total--, que se repartirán por los municipios de la mancomunidad, a través de asociaciones, colegios e institutos, y se enviarán a las universidades populares de la región y las casas de Extremadura en España y el extranjero. El objetivo es contribuir "a la reforestación natural de nuestra tierra", explicó Jorna.

Además, por los edificios públicos de la capital cacereña se repartirán belloteros con este fruto, para que todo el que lo desee pueda participar en este proyecto, que el año pasado ya tuvo una experiencia piloto en Casar de Cáceres.

Los folletos incluyen algunos consejos básicos para que la siembra de la bellota no resulte infructuosa. Así, se aconseja que se utilicen bellotas características de las zonas en las que se vaya a plantar; que se siembren en un lugar a salvo del apetito animal y que se entierren ligeramente y en posición horizontal.

Gregorio Tovar, quien ideó esta campaña, mostró su satisfacción por que la iniciativa haya ampliado fronteras y sugirió que, ya que "la bellota y la encina son parte de nuestra esencia, no estaría mal que utilizásemos este fruto como felicitación navideña".