Evitar que las llamas puedan llegar al archivo de un centro hospitalario es algo obligado. La seguridad en él se hace doblemente necesaria porque, entre otros motivos, en él se trabaja con documentación muy sensible, tanto la que está en papel como la informatizada, y con material altamente inflamable, como papel o acetatos.

Los responsables del hospital San Pedro de Alcántara son conscientes de ello, y al objeto de garantizar tanto la seguridad personal como la física, "pues perder un archivo de historias clínicas en un incendio es algo caótico", se ha dotado al nuevo archivo del hospital de modernas y avanzadas medidas contraincendios.

Un doble sistema de detección y extinción de incendios hace que la zona sea infranqueable para las llamas, máxime por el hecho de que está "dotada con un sistema específico de extinción, no de agua, sino de polvo, que lo que hace es consumir el oxígeno y así evitar que el fuego pueda llegar a aparecer".

Dispone, para ello, de 18 bombonas que, ante la detección de fuego, distribuyen el polvo que contienen por una canalización que discurre por todo el archivo y lo descargan en escasos minutos, consumiendo el oxígeno y evitando así las llamas. Y para una mayor efectividad, todos los accesos al nuevo archivo del centro disponen de doble puerta de seguridad.