Los bolardos volvieron a jugar una mala pasada. Pero esta vez no fue a ningún turista sino al coche de la grúa de la policía local, que ayer por la mañana quedó atrapado en uno de los que se accionan con llave y que está situado en la calle San Pedro. Los hechos obligaron a cortar el tráfico en la calle Clavellinas (acceso a Parras) aunque no se produjeron incidentes dada la hora del suceso: en torno a las 08.30.