El Ayuntamiento de Cáceres ha aprobado, por unanimidad de los grupos políticos (PP, PSOE, C's y CCTú), la ordenanza específica que agilizará los trámites de Ayudas Económicas de Urgencia Social que concede el Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS).

El último pleno del curso político, de carácter extraordinario, ha sido fugaz y apenas ha durado un minuto.

A la salida de la sesión plenaria, la alcaldesa, Elena Nevado, ha explicado que esta ordenanza hará que la concesión de estas ayudas "sean más ágiles pero también más exigentes, para que lleguen a las personas y familias que realmente lo necesiten".

Según Nevado, la propia Intervención Municipal solicitaba que se acreditara que esas subvenciones estuvieran justificadas debidamente, así como la situación de exclusión social que sufrían las familias solicitantes.

La concejala de Asuntos Sociales, Marisa Caldera, ha precisado que la ordenanza aprobada hoy amplía de 12 a 14 las pagas que recibirán las familias y los beneficiarios.

Además, se incluye una ampliación del plazo de justificación de las ayudas sociales por los beneficiarios a tres meses (antes solo era de un mes). Este fue uno de los puntos alegados por la Red Solidaria Popular (RSP) en el Consejo Rector del IMAS.

También se aclara que las ayudas son compatibles entre sí con otras, "siempre dentro de los límites que marca el documento".

La ordenanza regula la concesión de ayudas económicas, periódicas y no periódicas, de urgencia social para afrontar gastos de carácter primario, relativos a la cobertura de las necesidades básicas por necesidades excepcionales y prevenir situaciones de exclusión social, que favorezcan la inclusión social de los beneficiarios.

La cuantía de las ayudas que ha establecido el IMAS en la nueva ordenanza va desde los 487,01 euros para aquellas unidades familiares de un solo miembro, hasta los 1.031,29 para aquellas en las que conviven ocho o más familiares.

Se contempla, igualmente, un amplio abanico de ayudas para tratamientos especializados, ortopedia, prótesis dentales, lentes de contacto, adquisición de material escolar, para el alquiler de vivienda habitual, la hipoteca y alimentación infantil, entre otros.